Si desea proteger sus riñones, ¡no haga esto!
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Los riñones son uno de los órganos vitales de los que depende el correcto funcionamiento del cuerpo. Con apariencia de frijol, estos dos órganos se colocan lateralmente contra los músculos de la espalda en la cavidad abdominal superior, justo debajo de la caja torácica.
La lista de funciones que realizan los riñones es bastante larga. Para empezar, desintoxican la sangre, filtran los desechos a través de la orina y eliminan el exceso de agua del cuerpo. Además, los riñones retienen agua cuando el cuerpo necesita más.
Además, estos importantes órganos ayudan a regular los niveles de calcio y fosfato en el cuerpo. También secretan hormonas importantes que ayudan a regular las funciones corporales como la presión arterial y la formación de glóbulos rojos: los eritrocitos. Estos son vitales para transportar oxígeno y nutrientes importantes por todo el cuerpo.
La función renal adecuada es vital para la salud en general. Varios signos pueden indicar un mal funcionamiento de los riñones. Los síntomas más comunes incluyen cambio de color y cantidad de orina, mareos, vómitos, anemia, problemas respiratorios, sensación de frío la mayor parte del tiempo, cansancio o fatiga, picazón en la piel, mal aliento y dolor repentino en el cuerpo.
1. Ingesta de agua insuficiente
Beber cantidades insuficientes de agua puede ser perjudicial para la salud de sus riñones. Como se mencionó anteriormente, la función principal de los riñones es eliminar los desechos metabólicos del cuerpo y regular la producción de eritrocitos.
Cuando no hay suficiente agua en el cuerpo, hay menos flujo de sangre a los riñones porque la sangre se vuelve más concentrada. Esto afecta la capacidad de los riñones para eliminar toxinas del cuerpo, lo que eventualmente conduce a la acumulación de toxinas en el cuerpo.
La Fundación Nacional del Riñón recomienda beber un mínimo de 10-12 vasos de líquido al día para adultos sanos. Esto asegurará una función renal óptima, así como la hidratación corporal.
2. Consumir demasiado café
La ingesta excesiva de cafeína puede provocar hipertensión, que en consecuencia, sobrecarga los riñones. Esto puede dañar sus riñones a largo plazo.
Según un estudio de 2002 publicado en Kidney Interonanatil, la cafeína se ha relacionado estrechamente con los cálculos renales porque la cafeína aumenta la excreción de calcio en la orina. Sin embargo, si se consume moderadamente, la cafeína no causará problemas de salud a la mayoría de las personas. La dosis recomendada es de 1 a 2 tazas de café y 3 tazas de té al día. También se recomienda reducir otras fuentes de cafeína, incluidas las bebidas gaseosas y energéticas, el chocolate, el cacao y algunos medicamentos.
3. Alto consumo de sal
Demasiada sal puede causar daños graves a los riñones junto con otras complicaciones de salud. Dado que los riñones metabolizan el 95% del sodio consumido a través de los alimentos, la ingesta excesiva de sodio ejerce una gran presión innecesaria sobre este órgano.
En otras palabras, el alto consumo de sodio hace que los riñones trabajen más para eliminar el exceso de sal. En consecuencia, esto da como resultado una función renal reducida y retención de agua en el cuerpo. La retención de agua, por otro lado, puede aumentar la presión arterial, lo que empeora aún más la salud de los riñones.
Además, la ingesta de sal aumenta los niveles de proteína urinaria, una de las causas subyacentes de la enfermedad renal.
Los requerimientos diarios de sodio recomendados no deben exceder los 5 gramos. Todo lo anterior no es seguro para sus riñones y su salud en general. 1 cucharadita de sal mide alrededor de 6 gramos.
4. Beber demasiado alcohol
No hay nada de malo en el consumo moderado de alcohol. Sin embargo, beber en exceso puede ser realmente perjudicial para los riñones. Por un lado, el alcohol ejerce una gran presión sobre los riñones y el hígado. Cuando se consume en grandes cantidades, el ácido úrico se deposita en los túbulos renales y conduce a la obstrucción tubular. Esto lo pone en alto riesgo de insuficiencia renal. Además, el alcohol provoca deshidratación, lo que afecta la función renal normal.
La cantidad recomendada de alcohol por día es de 2 bebidas para hombres y 1 bebida para mujeres y personas mayores.
5. Falta de sueño
La falta de sueño es un problema de salud común relacionado con la forma de vida moderna. Los expertos en salud aconsejan que un sueño profundo de 6 a 8 horas al día es vital para la salud en general.
Lo que sucede en el cuerpo durante el sueño es que los tejidos de los órganos se regeneran. Entonces, cuando tiene deficiencia de sueño, este proceso de regeneración se ve obstaculizado, lo que resulta en daño renal y de otros órganos.
Varios estudios han encontrado que la falta de sueño también puede provocar hipertensión arterial y aterosclerosis (obstrucción de las arterias), lo que solo lo pone en un mayor riesgo de enfermedad renal.
Tener hábitos de sueño saludables y mantener un buen equilibrio entre el trabajo y el descanso mejorará significativamente la función renal y la salud en general.